.

En este blog encontraras inquietudes, planteamientos, pensamientos, noticias, curiosidades y una que otra cosa jocosa.
Si deseas hacer comentarios hazlo. Sólo no se publicarán los comentarios abusivos, obscenos, vulgares, odiosos, amenazantes, o que atenten en contra de personas o instituciones.
Los desacuerdos o correcciones al autor son muy bienvenidos... Pero siempre en un marco de respeto.

lunes, 11 de junio de 2007

El Fracaso

En el trayecto de nuestras vidas nos toparemos, muchas veces, con la felicidad que llenará nuestra vida de dicha y alegría... pero también tendremos muchos momentos que son tristes , amargos, duros y con fracasos.

El riesgo que corremos en busca del éxito nos puede llevar a fracasar.

Respecto a esto último... el fracaso... nos hace andar cabizbajos, nos hace valorarnos mal, casi menospreciarnos. Nos hace -a veces- perderle el sentido a la vida. Incluso son muchos los que atentan en contra de si mismos por el fracaso.

Leí en internet una reflexión sobre como enfrentar el fracaso que me gustó...

¡Si!... el fracaso -como todo en la vida- no sólo tiene un mal signiificado. Todo dependerá de si somos optimistas o no, pues el optimismo nos hará ver y juzgar sobre las cosas, viendo su aspecto favorable, viendo siempre el lado positivo que tienen las cosas, pues en el universo casi todo es perfecto y todo tiene siempre luz y oscuridad, que es parte del equilibrio universal.

Pues bien. Aprendamos a ver la luz de las cosas.

Los invito a leer una interesante reflexión sobre el fracaso:


"Fracaso no significa que somos unos fracasados.
Significa que todavía no hemos tenido buen éxito.


Fracaso no significa que no hemos logrado nada.
Significa que hemos aprendido algo.


Fracaso no significa que hemos actuado como necios.

Significa que hemos tenido mucha fe.

Fracaso no significa que hemos sufrido el descrédito.
Significa que estuvimos dispuestos a probar.


Fracaso no significa falta de la capacidad.
Significa que debemos hacer las cosas de distinta manera.

Fracaso no significa que somos inferiores.
Significa que no somos perfectos.


Fracaso no significa que hemos perdido nuestra vida.

Significa que tenemos buenas razones para empezar de nuevo.

Fracaso no significa que debemos echarnos atrás.
Significa que tenemos que luchar con mayor ahínco.


Fracaso no significa que jamás lograremos nuestras metas.

Significa que tendremos un poco màs en alcanzarlos.


Fracaso no significa que Dios nos ha abandonado.

Significa que Dios tiene una idea mejor
".




El Autor de esta reflexión es Desconocido. Pero lo importante es su profundo contenido.
A continuación les ofrezco un análisis sobre el fracaso.



Se despide vuestro amigo,



José Córdova García

domingo, 3 de junio de 2007

Nijū Hibakusha

El siguiente artículo lo encontré en una navegación por diversas páginas web.

En el se puede recoger una historia que resulta casi fantástica. Es el caso del ciudadano japonés Tsutomu Yamaguchi, quien es considerado un verdadero afortunado, pues sobrevivió no sólo a la bomba de Hiroshima, sino que también a la de Nagasaki.

Tsutomu Yamaguchi debería tener hoy 91 o 92 años. Su historia sirvió de inspiración para la película japonesa Nijū Hibakusha (“Doble hibakusha”, Hibakusha es un término japonés que significa “persona bombardeada”).

Yamaguchi era un ingeniero de Mitsubishi trabajando en el puerto de Nagasaki. El destino quiso que el fatídico 6 de Agosto, en el cual fue detonada la nefastamente famosa “Little Boy” de 13 kilotones, se encontrara en Hiroshima en un viaje de negocios con el fin de asegurar el suministro de repuestos al astillero de Nagasaki. En el momento exacto de la explosión se encontraba a 2 Km de la Zona Cero guarecido por una fortificada instalación de la zona industrial de Hiroshima. Sin embargo, el calor intenso y los temblores hicieron que sufriera fuertes quemaduras y contusiones por todo su cuerpo. Solo recuerda ver el flash y lo difícil que era respirar con el aire tan caliente. Tras ver el caos y el descontrol pasó dos días intentando volver a su ciudad. Al llegar, a pesar de las heridas decidió reportar lo ocurrido a su jefe quien, como toda la población de Japón, se encontraba totalmente ignorante de lo ocurrido. Como ingeniero Tsutomu sabía que el arma utilizada en Hiroshima era para nada convencional y temía que la guerra esté totalmente perdida. Sus temores se confirmarían ese mismo día, el 9 de Agosto, explotó la segunda bomba, Yamaguchi se encontraba en las oficinas del astillero a unos 3 Km de la zona cero reportando y describiendo todo lo visto. Volvió a sentir el calor intenso y en ese momento, según sus palabras “aterrado pensé que las explosiones me estaban siguiendo a mi”. Cuando salio a las calles llegó a pensar que había llegado el fin del mundo.

Pero prefiero invitarlos a leer el artículo:

--------------------------------------------------------------------------------------------------

Sobreviviendo milagrosamente los dos ataques nucleares

Por: Mainichi Shimbun

7 de diciembre de 2006

(Publicado originalmente el 18 de octubre de 2006)



Tsutomu Yamaguchi, un “doble hibakusha”, quien sufrió los ataques atómicos de Hiroshima y Nagasaki. (Noriko Tokuno / © Mainichi Shimbun)







“Cuerpos carbonizados boca abajo en el páramo nuclear
los Budas todos murieron,
sin haber soñado jamás lo que los mató”.


En un centro de rehabilitación cerca a su casa en Nagasaki, Tsutomu Yamaguchi, de 90 años, me muestra su poema, escrito en cartulina blanca. Ingeniero durante la Segunda Guerra Mundial en el astillero de las Industrias Pesadas Mitsubishi en Nagasaki, Yamaguchi es un hibakusha dos veces. Estuvo en Hiroshima el 6 de agosto de 1945 y en Nagasaki tres días más tarde. Es un testigo de ambos ataques nucleares.

Nunca ha estado activo en el movimiento pacifista. Poeta por afición, escribe ensayos y tanka, o versos cortos japoneses, para mantener viva la memoria de los bombardeos.

La película Nijū Hibakusha (“Doble hibakusha”), en la que Yamaguchi aparece, fue terminada en primavera. Para su lanzamiento en Estados Unidos en agosto pasado, Yamaguchi viajó a ese país y estuvo allá del 1 al 5 de ese mes. Nunca había tenido siquiera un pasaporte antes. La película fue exhibida en Nueva York, en la sede de las Naciones Unidas y en la Universidad de Columbia.

“Que nunca haya un tercer ataque nuclear”, dijo Yamaguchi. “Por favor, todos hagamos todo lo que podamos para eliminar las armas nucleares”.

Profundamente conmovido, un empleado de la ONU tomó de la mano a Yamaguchi. “Haremos nuestro mejor esfuerzo”, dijo. “Gracias”.

“Si no le llegamos a la gente en el extranjero”, afirma Yamaguchi, “la única oposición a la guerra nuclear estará en Japón”.


Tsutomu Yamaguchi con su hija,
Toshiko Yamazaki, realizan una rueda de prensa
en el Ayuntamiento de la ciudad de Nagasaki
en mayo de este año (2006) con motivo del lanzamiento
de la película Nijū Hibakusha
(“Doble hibakusha”)
(© Mainichi Shimbun)






Fue Yamaguchi quien les sugirió a los productores proyectar la película en el exterior. “Si puedo decir lo que pienso en Estados Unidos, sería lo suficientemente feliz para morir en cualquier momento”, declaró antes de partir hacia los EUA.

Cuando Yamaguchi regresó al Japón, el “doble hibakusha” describió la visita como quitarse “un gran peso de encima”. Me lo imagino sufriendo el infierno nuclear no una sino dos veces, y pienso para mí que sí, debió ser en realidad un peso muy grande.

Yamaguchi sigue siendo un firme partidario del Artículo 9 de la Constitución japonesa, que priva al país del derecho de hacer la guerra. Aun así, añade, “antes de que los misiles nucleares comiencen a volar, las Fuerzas de Autodefensa del Japón deben asegurarse de su disposición para interceptarlos”. Las actuales tensiones internacionales son un desafío al pacifismo de cualquier persona.


Por Jun’ichirō Nagasawa, Mainichi Shimbun, traducido del inglés por Julián Ortega Martínez

Extraído de: http://www.equinoxio.org/